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viernes, 23 de octubre de 2020

24 DE OCTUBRE DE 1970: SALVADOR ALLENDE ES CONFIRMADO POR EL CONGRESO PRESIDENTE CONSTITUCIONAL DE CHILE, por Daniel Chiarenza

 


Faltaba superar el último escollo. El Congreso Nacional de Chile decidiría en definitiva la

elección del presidente. Establecido por la Constitución porque ningún candidato obtuvo la

mayoría absoluta. Eso, en circunstancias anteriores, hubiera sido una mera formalidad.

Ahora se transformaba en un instituto decisivo de lucha política. La sesión del Congreso

se realizó el 24 de octubre. La derecha lanzó desembozadamente su propuesta de

impedir el acceso de Allende al gobierno. La democracia cristiana (DC), que había

proclamado su decisión de apoyar al candidato triunfante, parecía retroceder. Finalmente

condicionó su apoyo a Allende. Exigía un pacto “pacto de garantías democráticas”:

compromiso de la Unidad Popular (UP) de respetar la autonomía universitaria; que las

fuerzas armadas siguieran siendo un cuerpo profesional; absoluta libertad de prensa y

respeto a la expresión popular mediante el voto en elecciones libres.

El Comando de la UP, con el acuerdo de Salvador allende, manifestó su conformidad ante

el planteo de la DC. La decisión allanaba indudablemente el camino hacia el gobierno. “La

determinación se tomó –dice una declaración de la UP- porque ella corresponde a

nuestras permanentes concepciones y propósitos de velar por los principios democráticos

más amplios, así como la de cumplir con el programa planteado al pueblo”. Sobre esta

base, la DC acordó su pleno apoyo al resultado de la elección del 4 de septiembre de

1970. Estos eran los aspectos formales de la cuestión, sin embargo. Por abajo, oscuros

intereses se movían con un plan para impedir el acceso al gobierno de la UP.

La gestación de un golpe se olía en el aire. Una ola de atentados terroristas sacudía al

país. La respuesta de la UP fue agresiva. Allende amenazó con “paralizar el país, desde

Arica hasta Magallanes, con una huelga general”, si el Congreso lo desplazaba, “los

campesinos ocuparán las tierras, los obreros las fábricas, los maestros las escuelas, los

empleados públicos sus oficinas”, manifestó a fines de septiembre en una concentración

popular en Concepción, al sur del país.

El 22 de octubre, dos días antes de la sesión del Congreso Nacional, la reacción apelaba

a un recurso desesperado e inútil. El general René Schneider, comandante en jefe del

Ejército, era baleado a mansalva.

El Siglo, diario del Partido Comunista, denunció inmediatamente a la CIA como

responsable del atentado. Era evidente el propósito de precipitar un golpe militar que

anulara el proceso electoral. La Junta de comandantes en jefe, tras una prolongada

reunión, dio a conocer una declaración: “La Junta de comandantes en jefe, reunida

extraordinariamente hoy y presidida por el señor ministro de Defensa Nacional, acuerda

condenar y repudiar con la máxima energía el cobarde atentado de que ha sido víctima el

comandante en jefe del Ejército, general René Schneider”. Más adelante: “Advierte a toda

la ciudadanía que acciones tan viles como ésta no harán variar su reiterada y permanente

actitud de cumplimiento cabal de su misión”.

La situación era realmente dramática, y el fantasma del golpe de Estado era algo más que

un espectro, como habría de poner en descubierto la investigación posterior. El general

Viaux y varios oficiales retirados (y algunos en actividad) habían participado directamente

en la preparación del atentado. Pero el intento desesperado fue inútil. La avalancha de la

voluntad popular era imparable.

El 24 de octubre el Congreso consagró presidente a Salvador Allende: 135 votos a favor y

35 en contra. El anuncio del resultado fue celebrado estruendosamente. La sala del

Congreso escuchó el grito del diputado socialista Mario Palestro: “¡Viva Chile, mierda!”,

coreado con entusiasmo por los presentes. Allende, informado oficialmente de su victoria,

declaró a la prensa: Tengo que agradecer el sacrificio enorme de tantas mujeres y


hombres que hicieron posible mi elección. Tenemos ahora la obligación de crear una

nueva sociedad, una nueva conciencia… Esta fue una victoria del pueblo”.

3 comentarios:

  1. Viva Chile!!!!! Viva Allende querido!!!!!

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  2. Viva Chile!!! Viva Allende querido!!

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  3. Viva Chile, su pueblo,con el mejor de los recuerdos y concreción de la continuidad del pensamiento de Salvador Allende...!!!��✌️✌️✌️��

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